viernes, 11 de abril de 2008

¡punch!

Señoras y señores. Ya lo sé. Lo sé. Llegué al final del laberinto. Terminé de caer del último espiral.

Las cosas, a partir de éste momento, no van a volver a ser como han venido siendo hasta ahora.

Descubrí la raíz de todo eso a lo que uno le dice 'conflicto'.

Esos 'problemas' imaginarios que de a ratos lo andan asediando a uno, estorbandole el camino, y rompiendole soberanamente las pelotas.

Lo descubrí. Me di cuenta de lo que pasa.

Lo que pasa...

es que a veces...

soy un reverendo pelotudo.

4 comentarios:

Sabúl dijo...

"rompiendole soberanamente las pelotas", y "reverendo pelotudo" son dos expresiones que tienen mucho que ver entre sí.

Polonia dijo...

si. y ambas tienen una contundencia que hace que sea muy placentero decirlas.

Polonia dijo...

ah! y también está la relación política entre el soberano y el reverendo, y la relación semántica entre pelotas y pelotudo.

uau.

nana dijo...

ojo, quizas si seguis investigando te des cuenta que no solo la pelotudez es el conflicto si no que puede haber mucha idiotez, negligencia y hasta un poco de inmadurez.


eso me pasa siempre